El director de la Policía, general William René Salamanca, anunció este viernes el hallazgo de un presunto plan para atentar contra el Palacio de Justicia en Bogotá, detallando que se llevaron a cabo dos allanamientos en Ciudad Bolívar, al sur de la capital, en los que las autoridades incautaron explosivos y una maqueta del edificio.
En uno de los inmuebles, las autoridades encontraron una maqueta detallada del Palacio de Justicia, ocho kilos de amonal y 68 cartuchos.
Según la información proporcionada, Miguel Ángel Alarcón Garcés, residente en uno de los inmuebles allanados, fue hallado muerto en el lugar. Alarcón, conocido en la zona por sus actividades de microtráfico, tenía antecedentes por tráfico de estupefacientes.
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El material incautado fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación para las investigaciones correspondientes. El general Salamanca subrayó que, a pesar de estos hallazgos, “la seguridad del Palacio de Justicia está fortalecida”, enfatizando que las medidas de seguridad han sido intensificadas para proteger la sede de las altas cortes.
Altas cortes rechazan amenazas
Las Altas Cortes del país, por su parte, expresaron un firme rechazo ante cualquier amenaza que ponga en peligro la integridad de los servidores judiciales y la autonomía de la justicia en el país.
La Comisión Interinstitucional de la Rama Judicial y la Comisión Nacional de Disciplina Judicial condenaron de manera contundente los actos que puedan poner en riesgo el funcionamiento de la justicia.
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Las autoridades judiciales subrayaron la importancia de garantizar la seguridad en este entorno y han ofrecido toda la cooperación necesaria para que las investigaciones avancen de manera rápida y efectiva.
Este es el doble crimen que estaría relacionado
Q’HUBO conoció los detalles del macabro hallazgo de dos cuerpos con signos de violencia en el sector conocido como Caño del Bronx, localidad de San Cristóbal.
Aterrados y con una expresión de desconcierto se encontraban en la madrugada de ayer los habitantes del barrio Moralba (San Cristóbal), tras descubrir dos cadáveres en una zona boscosa cercana a la invasión Santa Rosa, ubicada en la calle 41B sur con carrera 13B este.
Según comentan en la zona, el hallazgo de los cadáveres ocurrió sobre las 5:00 a. m., cuando una mujer transitaba por el Caño del Bronx, como se conoce esta deprimida zona del sur de la ciudad.
“Dicen que una muchacha estaba saliendo a trabajar, o algo así; aún estaba oscuro. Me contaron que la muchacha vio a los dos hombres tirados al lado de donde están las casas y pegó un grito. Fue allí cuando avisaron a la Policía, pero esos pobres debieron haber quedado muy mal, ya que el levantamiento de los cadáveres duró casi tres horas”, comentó una residente del barrio a Q’HUBO.
La zona donde fueron hallados los cuerpos está donde comienza una montaña, en medio de un potrero que conduce al caño, un lugar muy frecuentado por habitantes de calle. Los dos jóvenes, de aproximadamente 38 años, fueron hallados con varios disparos que, al parecer, les fueron propinados durante la noche del domingo, según relataron los mismos vecinos.
“Dicen que a los muchachos los mataron varias horas antes, pero lo raro es que nadie escuchó nada. Comentan que les dieron varios tiros en la parte alta del barrio y que en la madrugada los dejaron abandonados allí. La verdad esto está muy peligroso, porque el barrio se había calmado. Ya no se sabe qué esperar después de esto”, relató otra moradora de la zona.
Q’HUBO pudo confirmar, de manera extraoficial, que uno de los jóvenes asesinados vivía en la localidad de Ciudad Bolívar, mientras que el otro había llegado a vivir cerca del punto donde lo hallaron muerto.
“Uno de los muchachos que mataron había llegado al barrio hace como un mes y medio. Vivía como inquilino en una casa cercana. La verdad no se sabía mucho de él, porque era nuevo por estos lados. Lo que sí se supo es que la familia del joven llegó para reconocer el cadáver. Pobrecitos, se veían destruidos por el dolor de perder a su familiar”, comentó un habitante del lugar.
Hasta el momento, se desconocen los móviles que desencadenaron este doble asesinato a bala.
Desmanes en la invasión
“Esta zona es muy complicada por el tema de la venta de drogas, por eso la Policía tuvo que venir bien preparada, porque entrar a ese barrio es un peligro”, comentó un comerciante del sector.
Cerca de las 10:40 a. m. de ayer, cuando los agentes del CTI habían terminado de realizar el levantamiento de los cuerpos, agentes de la Policía, acompañados por funcionarios del GOES (Grupos Operativos Especiales de Seguridad), comenzaron a revisar los antecedentes de las personas que se encontraban en la invasión cercana al lugar del hallazgo. Sin embargo, un sujeto puso resistencia cuando se le pidió su documento de identidad para revisar sus antecedentes.
En ese momento, varias mujeres impidieron que los oficiales realizaran su labor. Acto seguido, la comunidad comenzó a agredir a los agentes, quienes se vieron obligados a hacer uso legítimo de la fuerza para contener a la turba enfurecida.
Con información de Colprensa.
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