En plena celebración de Navidad se registró el escabroso hallazgo de 3 cadáveres masculinos en una vereda del municipio de Mosquera. Q’HUBO logró conocer quienes fueron las víctimas fatales. Le contamos los detalles.
La celebración de Navidad no fue agradable para tres familias en Mosquera (Cundinamarca), quienes tuvieron que atender el llamado por parte de las autoridades del municipio la tarde de este lunes, tras confirmarse el hallazgo de los cuerpos sin vida de Jorge Elkin García Pacheco (40 años), Carlos Eduardo López Pineda (28 años) y Cristian David Cotacio Muñoz (20 años).
Un trabajador de la finca Santa Marta, ubicada en la vereda San Francisco, fue quien se percató de la presencia de los hombres en una de las zanjas donde reposaban cubiertos por agua, por lo que de inmediato se llamó a la Policía y a los Bomberos del municipio para que procedieran con el levantamiento de los occisos, el cual fue llevado a cabo por unidades del CTI (Cuerpo Técnico de Investigación) de la Fiscalía General de la Nación.
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De acuerdo con lo que informaron los Bomberos, al momento de sacar del agua a los tres hombres se alcanzaron a evidenciar varias heridas ocasionadas con arma blancas, algunas de ellas precordiales (a la altura del pecho).
Esto ha ocasionado que aún las familias de los tres hombres, de quien en principio se había comentado que eran primos pero no es así, les soliciten a las autoridades premura en la investigación, porque como le contó Margarita Fonseca (esposa de Jorge) a Q’HUBO ayer, al cierre de esta edición era la hora en la que todavía no habían recibido una llamada para tener claridad sobre qué fue lo que ocurrió.
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Asimismo, ayer la Fiscalía le confirmó a este medio que debido a que las labores de levantamiento se iniciaron pasadas las 6:30 p. m. del lunes, no se pudo avanzar con la recolección de pistas en el área por falta de luz, y es por eso que se reanudaron las actividades ayer, con el fin de establecer qué llevó a los victimarios a terminar con sevicia con los trabajadores.
“Hacía dos semanas que él (Jorge) se había ido a sacar papa, porque él trabajaba como panadero”, comentó Margarita, quien añadió que habló con su esposo por última vez pasadas las 2:00 p. m. del sábado 23 de diciembre.
“Yo lo llamé y él me dijo que ya estaba por salir”, pero la mujer y sus dos hijas de 5 y 13 años se quedaron esperando a Jorge, quien nunca llegó a su vivienda, ubicada en el barrio Porvenir Centro.
“La verdad él quería conseguir más plata”, pero Margarita, ni Jorge, ni los demás víctimas y familiares sospecharon que un trabajo que se veía “inofensivo” terminaría cobrándoles la vida.
“La verdad lo único que queremos es justicia, que esto no se quede impune porque ellos nos son unos perritos para que los maten y los dejen así”, concluyó Margarita, quien seguirá atenta a la llamada de la Fiscalía para esclarecer los hechos que terminaron por arrebatarle los motivos para celebrar la llegada de este 2024.
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