Los familiares piden ayuda a la comunidad para que se comuniquen al número 601 5803815, extensiones 13 y 35, si tienen datos de Miguel.
Los familiares de Miguel Alejandro Santamaría están angustiados por no tener pista alguna de este humilde hombre, quien desapareció el domingo 25 de agosto después de salir de su casa, ubicada en el barrio Puerto Rico (Rafael Uribe), justo en la diagonal 48C sur con carrera 5C, donde vivía con su pareja sentimental desde hace cuatro años.
Miguel, quien trabaja como electricista independiente realizando trabajos para varios locales comerciales, salió ese día informándole a su pareja que iba a hacer una diligencia. Esta fue la última comunicación que tuvo con algún conocido.
- Le puede interesar: Así despidieron a Javier Acosta antes de su entierro
“Yo lo crié desde que tenía 2 años. Él nunca se había ausentado antes, porque Miguel es un hombre trabajador y muy responsable. Nos enteramos de su desaparición ese mismo día, porque la joven con la que vive nos avisó dos horas después de que salió de la casa. Ella nos dijo que él le había comentado que iba a salir a buscar un dinero en uno de los dos lugares donde trabajaba”, le comentó a Q’HUBO José Darío Sáenz Sanabria, de 53 años, padre de Miguel.
Según relató el progenitor, esa misma noche, al no obtener respuesta en su celular, la familia comenzó a preocuparse. Muy temprano, a la mañana siguiente, salieron a buscarlo con la ayuda de las autoridades, en un esfuerzo por encontrar alguna pista sobre su paradero.
“El lunes fuimos directamente a Medicina Legal, pero no obtuvimos información sobre su paradero. Al día siguiente nos aceptaron la denuncia por desaparición. Al investigar, supimos que recargó su tarjeta del Sitp para salir a trabajar y que su último paradero fue en la calle 22 con carrera Décima. Fuimos a los lugares donde él trabaja, en la calle Décima con carrera 19 (localidad de Santa Fe) y en la calle 63 con avenida Caracas (Chapinero), y colocamos varios carteles para encontrarlo. Sin embargo, sentimos que la Fiscalía tomó nuestra denuncia como una más. Solo queremos que nos ayuden revisando las cámaras de seguridad de la zona y nos apoyen en esta búsqueda, porque nos sentimos abandonados”, concluyó el padre de Miguel.
Los seres queridos de Miguel, quien el pasado sábado cumplió 39 años, solo esperan que las autoridades los respalden y que cualquier persona con información sobre su paradero se comunique de inmediato con ellos, pues tienen la esperanza de que él regrese pronto sano y salvo.
Elija a Q’HUBO Bogotá como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí
