Horas después de recibir un ataque armado por parte de miembros del autodenominado Estado Mayor Central (EMC), la mayora Carmelina Yule Paví falleció, pues la gravedad de las heridas causadas no le permitió continuar en vida.
En el atentado, perpetrado en la vereda La Bodega, de Toribío (Cauca), la lideresa indígena Carmelina recibió varios disparos en su rostro, por lo que fue trasladada al hospital universitario Fundación Valle del Lili, en Cali (Valle del Cauca).
“La mayora Carmelina Yule Paví falleció por la gravedad de sus heridas. Este crimen de lesa humanidad cometido por el EMC FARC no puede quedar en la impunidad”, comunicó la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca – Territorio del Gran Pueblo.
Lo denunciado por la comunidad es que el 16 de marzo el Bloque Occidental de la disidencia secuestró a un menor de edad. Cuando el resto del pueblo se opuso e intentó rescatarlo, fue recibido con disparos indiscriminados de fusiles.
En la ráfaga fue herida Carmelina Yule, de 52 años, reconocida tejedora defensora de derechos humanos del sector, y otros dos comuneros que continúan bajo observación médica. La Unidad de Restitución de Tierras rechazó el hecho y pidió investigarlo.
“A su familia y comunidad, mucha fortaleza, y a las autoridades, un llamado para esclarecer los hechos”, escribió la entidad estatal en su cuenta de X. El ataque también recibió el rechazo de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos.
Naciones Unidas pidió a los grupos armados respetar de forma “incondicional” los derechos a la vida y las libertades fundamentales de la población, así como la autonomía, el gobierno propio y la jurisdicción de los pueblos indígenas.
“Recordamos que aunque el diálogo con actores armados puede contribuir a mejorar la situación en los territorios, el Estado es el garante de los derechos humanos y su prioridad es reforzar su capacidad de respuesta”, señaló el ente internacional.
Un día después del crimen, el gobierno de Gustavo Petro suspendió el cese al fuego bilateral que se sostenía con el EMC en Nariño, Cauca y Valle del Cauca. Además, ordenó que el 20 de marzo se retomen las operaciones ofensivas en su contra.
“El EMC del Cauca en sus diferentes frentes no dio desde el principio ninguna señal de querer un proceso serio de paz. Creyó, muy equivocadamente, que la negociación era para fortalecerse militarmente”, expresó el presidente Petro.
En su cuenta de X, el mandatario añadió que el Gobierno “no puede permitir que el EMC, como los antiguos españoles esclavistas, piense que es válido matar indígenas y personas pobres de los territorios de Colombia”.
Redacción Colprensa
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