El atroz caso del pequeño Gabriel Esteban Cubillos Rodríguez ha conmocionado al país. Y no es para menos, pues el pequeño apareció sin vida en un hotel en Melgar con signos de asfixia y todo apunta a que el responsable de su muerte es su propio padre, Gabriel Enrique González Cubillos.
Al parecer, Gabriel Enrique asesinó a su propio hijo para vengarse de su expareja y madre del pequeño, Consuelo Rodríguez, con quien había terminado su relación desde hacía cinco meses. Según la investigación realizada por las autoridades, el sujeto de 50 años creó todo un plan para causarle un profundo dolor a la mujer.
González Cubillos recogió a su hijo el domingo en su casa, ubicada en Sierra Morena (en Usme), en donde el menor vivía junto a su otro hermano y a su mamá. Q’HUBO visitó el lugar y habló con los vecinos del niño, quienes contaron cómo vivía esta mujer junto a sus dos hijos y la relación que tenía con el acusado del homicidio.
La humilde vivienda donde vivía el pequeño Gabriel está ubicada en una zona destapada que no cuenta con alumbrado público ni calles pavimentadas; es de un solo piso y está construida con latas y madera.
El techo de la vivienda es de latas y tejas zinc, ambas se ven deterioradas y oxidadas, además, están aseguradas con ladrillos, para evitar que los fuertes vientos se las lleven.
Allí, en esta pequeña casita vivía el niño Gabriel, quien cruzó la puerta blanca feliz la tarde del domingo para reunirse con su papá, a quien amaba, pues le dijo que se iban a ir a piscina.
“Ese tipo los sacó de la casa y por eso se vinieron a vivir aquí”: vecina de Gabriel y su mamá
Q’HUBO habló con los vecinos de la señora Consuelo y del pequeño Gabriel, quienes nos contaron sobre el poco tiempo que llevaba esta madre viviendo allí con sus dos hijos, pues González Cubillos la había sacado de su casa hacía cinco meses.
“Ellos vivieron muy cerca de la casa donde ella actualmente vive. En esa casa compartieron un buen tiempo y hace unos 5 meses el mismo tipo la sacó a ella de la casa mediante intimidaciones y amenazas; nosotras como amigas lo que hicimos fue ayudarla a conseguir un lugar en el que pudiera estar con sus hijos tranquila y colaborarle para pagar la primera mensualidad. Además, le aconsejamos que denunciara a ese tipo porque era muy frecuente que la tratara mal y que instrumentalizara al niño para sacarle información de lo que hacía la mamá”, le contó ayer a Q’HUBO una amiga de la familia que, además, es líder de la zona.
El hombre le manifestó a la madre de Gabriel Esteban que lo llevaría al parque Simón Bolívar a una reunión familiar donde celebrarían amor y amistad. La madre asintió y el sujeto bajó de la mano con el niño por las escarpadas calles de la parte alta de la localidad como de costumbre. Hasta ahí, todo normal.
A partir de ese momento, empezó a llevar a cabo el sujeto empezó a llevar el maquiavélico plan para acabar con su propio hijo.
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