La Tramacúa fue inaugurada en abril de 2000 durante la presidencia de Andrés Pastrana, su construcción fue el resultado de una colaboración con el Buró Federal de Prisiones (BOP) de los Estados Unidos, y su diseño refleja las exigencias de seguridad de una de las penitenciarías más modernas del país.
Ubicada a solo 3.5 kilómetros del batallón La Popa y en el camino hacia el corregimiento de La Mesa, en el departamento del César, La Tramacúa fue erigida en terrenos donados por el entonces alcalde de Valledupar, Johnny Pérez Oñate. Su creación surgió como respuesta a la alarmante situación de hacinamiento que enfrentaba la cárcel judicial de la ciudad, un problema que fue abordado por el INPEC y el Ministerio de Justicia tras el fallo de la T-153 de 1998.
La Tramacúa cuenta con una estructura que incluye dos pabellones para sindicados, dos pabellones de mediana seguridad y, predominantemente, pabellones de alta seguridad. Su diseño robusto y la dedicación de su personal han contribuido a que sea considerada una de las cárceles más seguras del país.
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Una de las características que ha contribuido a su alta seguridad es un muro de aproximadamente siete metros de altura y 50 centímetros de ancho, diseñado para prevenir fugas.
Criminales más peligrosos que han estado en La Tramacúa
A lo largo de los años, la cárcel ha albergado a algunos de los criminales más notorios de Colombia. Entre sus internos se han encontrado figuras de alto perfil como Luis Alfredo Garavito, el infame asesino en serie, así como alias Rojas y Popeye, exmiembros de la mafia colombiana. Además, la penitenciaría ha recibido a prisioneros con fines de extradición, como Miguel Rodríguez Orejuela y Camilo Torres, alias Fritanga, destacándose por su capacidad de contener a delincuentes de extrema peligrosidad.
Según las autoridades, su nivel de seguridad se ha debido, en parte, a un muro de unos siete metros de alto por 50 centímetros de ancho que ha impedido fugas.
Otra de las razones por las cuales se envían a estos delincuentes a este centro penitenciario:
- Contención de Conflictos: Al concentrar a criminales de alto perfil en un solo lugar, se busca evitar que tengan influencia o control sobre otras áreas del sistema penitenciario, lo que podría llevar a conflictos o a la expansión de sus actividades delictivas.
- Medidas disciplinarias: La Tramacúa también se utiliza para enviar un mensaje de que el gobierno está tomando medidas enérgicas contra la criminalidad. Al enviar a criminales peligrosos a esta prisión, se busca disuadir a otros potenciales delincuentes.
- Facilidades de control: La infraestructura y el personal entrenado en La Tramacúa están preparados para lidiar con la violencia y el comportamiento disruptivo que a menudo presentan estos criminales.
- Programas de rehabilitación: Aunque el enfoque principal es la seguridad, algunos programas de rehabilitación están disponibles para los reclusos, aunque su efectividad varía.
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