El millonario somete a rutinas extremas para mantener su salud de hierro.
La idea de tener arrugas y canas es algo que aterra a Bryan Johnson, un multimillonario que le ha declarado la guerra al paso del tiempo y está decidido a emplear su fortuna y probar cualquier método con el objetivo de lograr la juventud eterna.
En esta ocasión, el hombre de apenas 45 años ha saltado nuevamente a los medios tras revelarse que su hijo, de apenas 17 años, le dona sangre, la cual se inyecta para cumplir su sueño de parecer de 18.
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Biohackea su cuerpo
Bryan Johnson no escatima en gastos para encontrar la fuente de la eterna juventud, pero no lo hace enviando equipos de exploración, en su lugar tiene un equipo de 30 médicos que lo monitorean día y noche mientras él se somete a rutinas extremas para mantener su salud de hierro.
Como él mismo lo ha dicho, está empleando todos los métodos para biohackear su organismo y lograr que órganos como el cerebro, los riñones o el hígado trabajen igual que como lo hacían cuando él era un adolescente. Para lograr este antienvejecimiento forzado, Johnson mantiene una estricta dieta vegana, en la cual solo consume 1.977 calorías por día, ni una más ni una menos.
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Sagradamente se acuesta todos los días a la misma hora y se levanta sin falta a las 5 de la mañana para tomar dos docenas de suplementos vitamínicos. Además, mantiene una rutina de una hora diaria de actividad física, que se suma a sus ejercicios de alta intensidad 3 veces por semana.
En su plan de antienvejecimiento también toma un batido verde con creatina y colágeno, además hace enjuagues con aceite de árbol de té y gel de antioxidantes. No solo es lo que come, sus médicos monitorean a diario su peso, masa corporal y grasa, mes a mes lo examinan con máquinas de ultrasonido y resonancias, y hasta usa gafas de bloqueo de luz azul dos horas antes de dormir para mejorar la calidad de su sueño.
“Estoy tratando de demostrar que las autolesiones y la decadencia no son inevitables”, aseguró el magnate al portal Bloomberg sobre las motivaciones de su régimen, el cual busca servir de ejemplo para el resto de la sociedad.
Ahora usa la sangre como fórmula anti-edad
Johnson está detrás de la compañía Kernel, que trabaja en desarrollos tecnológicos para el área de la salud, como lo es un casco de 50 mil dólares ($222 millones) para leer ondas cerebrales. Pero antes de meterse de lleno en este tema, Bryan amasó una fortuna de 800 millones de dólares (3,5 billones) luego de venderle a e-Bay una plataforma para procesar pagos por internet.
Hace unos días, Bryan se presentó con su hijo, Talmage (17 años); y su padre, Richard (70 años), para llevar a cabo su polémica técnica antiedad, un intercambio de sangre trigeneracional; esto con base en un experimento hecho en ratones, el cual mostró que la donación frecuente ayudó a mejorar su función cognitiva, metabolismo y estructura ósea.
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Una obsesión asesina
La historia de Bryan parece sorprendente, asquerosa y extraña; pero no es la primera vez que la sangre se convierte en parte de la obsesión por la eterna juventud. Elizabeth Báthory tiene el insólito récord de ser la más sanguinaria asesina serial de toda la historia, pues habría sido la responsable de más de 600 homicidios.
Báthory era una condesa de Hungría que citaba a mujeres vírgenes y las asesinaba dentro de su castillo para llenar su tina con la sangre de las jóvenes y luego tomar un baño para, supuestamente, alargar su vida. Elizabeth vivió 54 años (1560-1614), pero algunos dicen que esto es un mito alrededor de sus quebrantos de salud, pues padecía epilepsia y cambios repentinos de humor.
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