Estudios recientes respaldan la necesidad de esta restricción. Según un estudio de la Universidad Manuela Beltrán, cuatro de cada diez jóvenes en Colombia han usado cigarrillos electrónicos o vapeadores, influenciados principalmente por el entorno social y la ansiedad.
El municipio de El Retiro ha implementado una medida contundente para frenar el consumo de tabaco y vapeadores entre los menores de edad. En respuesta a las crecientes preocupaciones de padres, educadores y autoridades locales, el alcalde Santiago Montoya emitió un decreto que prohíbe la venta, uso y posesión de productos relacionados con el tabaco y cigarrillos electrónicos por parte de menores. Esta medida fue motivada por la percepción de que el consumo de estas sustancias representa un problema de salud pública en la localidad.
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¿Qué dice el decreto?
El decreto 181 establece que no se permitirá la comercialización, préstamo o distribución de cigarrillos electrónicos, vapeadores y productos similares a menores de edad. Esta normativa busca restringir el acceso de los jóvenes a estas sustancias y mitigar el impacto que el consumo de nicotina tiene en la salud de la población estudiantil, que incluye incluso a estudiantes de primaria. Además, se implementarán controles para evitar que estos dispositivos sigan circulando entre los menores.
El alcalde ha dejado claro que el decreto no es una medida superficial, ya que incluye sanciones severas tanto para los establecimientos que incumplan las normativas como para los menores y sus tutores. Entre las sanciones se destacan las multas, la suspensión de actividades comerciales e incluso la destrucción de los dispositivos confiscados. Esta decisión se tomó tras recibir varias quejas de instituciones educativas sobre el aumento del consumo de vapeadores en el municipio.
Según Montoya, la regulación del uso de vapeadores era una prioridad debido a las alertas emitidas por los docentes y padres de familia. Los manuales de convivencia de las instituciones educativas del municipio se modificarán para incluir la prohibición explícita de estos dispositivos, con el fin de evitar su uso dentro y fuera de las aulas. Esta medida busca no solo reducir el consumo, sino también educar a los jóvenes sobre los peligros de estas sustancias.
La Organización Mundial de la Salud ha advertido que los jóvenes que usan vapeadores tienen mayor probabilidad de desarrollar hábitos de tabaquismo en su adultez, además de los riesgos inmediatos como el desarrollo de enfermedades pulmonares y cardíacas.
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Debido al preocupante incremento del consumo de vapeadores entre menores en otras regiones de Colombia, sería conveniente considerar la extensión de esta normativa a nivel nacional. La creciente tendencia en el uso de vapeadores entre adolescentes sugiere la necesidad de una legislación más estricta en todo el país para proteger la salud de los jóvenes y evitar que estas sustancias sigan proliferando entre las generaciones más vulnerables.
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