La ley que rige el ajuste del salario mínimo en Colombia, la Ley 278 de 1996, establece que este debe basarse en factores como la inflación, la productividad de la economía y el aporte de los salarios al ingreso nacional.
Las proyecciones para el aumento del salario mínimo en Colombia en 2025 ya están siendo debatidas, y aunque las negociaciones formales no comenzarán hasta dentro de dos meses, los expertos han presentado sus primeras cifras. Actualmente, el salario mínimo en Colombia es de $1.300.000 y afecta a dos millones de trabajadores. Según diversos análisis, el aumento podría oscilar entre el 6% y el 10%, dependiendo de la inflación y otros factores económicos clave.
- Le puede interesar: Procuraduría formula cargos contra exfuncionario del Acueducto por presunto abuso sexual
Sergio Olarte, analista económico, sugiere que el incremento debería estar entre el 6% y el 7%, señalando que la inflación ha disminuido y que un aumento más alto podría reactivar la inflación, afectando la estabilidad económica. En este escenario, el salario mínimo podría subir a aproximadamente $1.378.000 con un incremento del 6%, y a $1.404.000 si el aumento es del 8%. José Ignacio López, presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), concuerda con un incremento moderado, pero plantea que podría llegar hasta un 10%, siempre que la inflación anual cierre por debajo del 6%.
El experto Óscar Cubillos, jefe de la Oficina de Planeación de Fedegán, también ha proyectado que la inflación se mantendrá alrededor del 5,5%, lo que sugiere que el aumento debería alinearse con este indicador. Cubillos advirtió que un aumento desmesurado del salario mínimo, superior al 10%, podría afectar negativamente la creación de empleo en Colombia. En cuanto a los sindicatos, algunos aspiran a un aumento mayor, proponiendo inicialmente un alza del 15,4% para llegar a $1.500.000, aunque las expectativas podrían ajustarse a una subida del 11,5%, lo que situaría el salario en $1.450.000.
Por el lado de los empresarios, su propuesta inicial se inclina por un aumento más conservador, de alrededor del 6%, debido al bajo crecimiento en productividad y la economía, que ha mostrado signos de recesión. En medio de estas posiciones, el gobierno podría proponer un incremento del 8,5%, lo que llevaría el salario a $1.410.000.
El contexto económico de los últimos años también influye en estas discusiones. En 2024, el salario mínimo aumentó un 12,1%, con una inflación del 9,3%, mientras que en 2023 el aumento fue del 16%. Estas cifras muestran la volatilidad en la inflación y la necesidad de un enfoque equilibrado para 2025. En definitiva, las proyecciones apuntan a que el incremento del salario mínimo debe ser moderado para evitar desajustes económicos, pero suficiente para mantener el poder adquisitivo de los trabajadores.
Elija a Q’HUBO Bogotá como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí
