El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso quedó en libertad. Horas después de que el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) confirmara que no existe ningún requerimiento judicial que le impida quedar libre, salió de la cárcel La Picota.

La noticia de que quedaría en libertad se conoció este miércoles. El Director encargado de ese instituto, teniente Coronel Rolando Ramírez Sanabria, confirmó que ese organismo junto con la ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, revisaron los procesos judiciales que tiene Mancuso y en ninguno tiene medida de aseguramiento.

“Luego de decisiones judiciales del pasado viernes frente a la libertad de Salvatore Mancuso, la dirección general del INPEC dispone de un equipo jurídico con el fin de acatar la decisión judicial, pero revisar otros procesos pendientes. Con ayuda y apoyo de la señora ministra de Justicia hemos tenido comunicación con las diferentes autoridades judiciales con el fin de que nos dieran una respuesta frente a requerimientos pendientes. El día de hoy nos confirman que no existe ninguno”, explicó el INPEC.

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Entre los documentos que comprobó el INPEC está uno entregado por la Fiscalía General de la Nación en el que notifica que contra de Mancuso no tiene ningún requerimiento o medida de aseguramiento.

“Por medio de la presente me informan que verificados con cada uno de los despachos fiscales adscritos a la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos y los sistemas misionales de información se estableció que, a la fecha el señor SALVATORE MANCUSO GÓMEZ, no es requerido por ningún despacho adscrito a esta dirección”, informó el ente investigador.

También una notificación de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), que aunque le negó la libertad hace unas semanas, notificó que allí tampoco existe alguna medida de aseguramiento en su contra.

Salvatore Mancuso, exlíder paramilitar de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), ha enfrentado un complejo proceso judicial desde su regreso a Colombia. Mancuso fue nombrado gestor de paz por el Gobierno después de cumplir una pena de 18 años en Estados Unidos por narcotráfico. Solicitó ser aceptado en la JEP como tercero voluntario, y se le aceptó en la categoría de “bisagra” entre las AUC y las fuerzas militares en los años 90 y 2000.

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La solicitud de Mancuso generó un conflicto de competencias entre la JEP y Justicia y Paz, el sistema judicial en el que se desmovilizó y entregó las armas durante el Gobierno de Álvaro Uribe. La Corte Constitucional aún no ha decidido cuál de estos tribunales tiene prioridad para decidir sobre su libertad, pero mientras eso ocurre Mancuso logró que su expediente fuera devuelto a la jueza de Justicia y Paz, argumentando que Mancuso no tiene sentencias pendientes en Colombia, quien lo dejó libre.

Redacción Colprensa.

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