El cuerpo de Adriana Morales Montero, de 29 años, fue encontrado sin vida y con múltiples puñaladas el pasado 5 de septiembre a la orilla del caño de la Calle 38 Sur, en el barrio Palmitas (Kennedy).
En ese momento, al no tener documentos que la identificaran, fue trasladada a Medicina Legal, donde días después fue reconocida por su última pareja sentimental y una amiga.
Este lamentable caso, al parecer, corresponde a un feminicidio cometido presuntamente por su ex pareja sentimental, con la que tenía varios conflictos, puesto que este se había llevado a su niña de 3 años.
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“Ellos tuvieron una relación por 3 años. Ella decía que él era muy agresivo, que la drogaba, le pegaba, la engañaba y la hacía sentir menos… todos los maltratos que usted pueda imaginar hacía ese hombre con ella”, le contó a Q’HUBO una amiga de la joven.
Aterrador crimen
Ha pasado más de una semana desde que se perpetró el homicidio de Adriana y lo único que esperan sus allegados es que se haga justicia y el responsable pague por lo que hizo.
Q’HUBO habló con algunas personas que la conocían y sus declaraciones son estremecedoras, pues todo apunta a que el asesino de Adriana sería su ex.
Tras ser víctima de maltratos y salir de la tormentosa relación, un día la bella mujer decidió interponer una denuncia en contra del sujeto, pero como este le había dado el apellido a la hija de ella, reclamaba pasar tiempo con la infante, hasta que un día se llevó a la menor y jamás la regresó.
Con el temor que le hiciera algo a la criatura, Adriana no denunció y trató de llevar las cosas “por las buenas”, así que le pedía que le dejara ver a su hija, pero este no se lo permitía, incluso se desconoce el paradero de la niña hasta el día de hoy.
“Ella se separó de él como en octubre del año pasado. Hace tres meses ella no veía a la niña, supuestamente él se la llevó para Cali y no se sabe del estado de la niña. Ella instauró una denuncia ante el Icbf, pero él no asistió cuando lo citaron”, contaron sus allegados.
El homicidio
Cuentan sus allegados que el pasado lunes 4 de septiembre, en horas de la noche, Adriana se encontró con su ex para hablar sobre la menor. Este sujeto la recogió en carro en el barrio Alameda (Fontibón), supuestamente irían al sector de Modelia, pero todo empezó a tornarse extraño cuando su pareja sentimental se percató que la ubicación aparecía por los lados del Portal de Las Américas y luego por Kennedy.
“Ella me compartió la ubicación para que estuviera pendiente porque iba a verse con Javier. Se fue como a las 9:40 de la noche. Cuando salía que estaba en Kennedy, por los lados donde encontraron su cuerpo, le dije que qué hacía por allá, pues era peligroso. Creo que en ese momento ya estaba muerta y me escribieron que supuestamente ya iba para la casa”, contó la pareja de la joven.
Las cosas se tornaron aún más sospechosas para los allegados de la joven, pues desde su celular escribían mensajes haciéndose pasar por ella, donde justificaban su ausencia. Como si fuera poco, solicitaron dinero diciendo que ella se encontraba en Medellín y necesitaba comprar un tiquete para Bogotá.
Finalmente, angustiados al no tener noticias de Adriana y no haberla podido contactar por llamada para asegurarse de que estuviera bien, decidieron ir a Medicina Legal para interponer la denuncia por su desaparición, pero se llevaron una desgarradora sorpresa.
“Le escribíamos cosas para saber si era ella, pero prendían el celular para responder y lo apagaban nuevamente. El jueves fuimos a Medicina Legal para reportarla como desaparecida, dimos la descripción y la persona que nos atendió nos dijo que una persona había ingresado el día martes con las características de ella, y sí era Adriana. Tenía 14 puñaladas y golpes”, añadió en medio de su dolor la pareja.
Por el momento, los allegados a Adriana, con el temor de que el asesino ande suelto y con una niña, piden a las autoridades agilizar la investigación para ponerlo tras las rejas. Ayer se reunieron en la funeraria para darle el último adiós a esta joven, víctima de una obsesión.
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