Ha pasado un mes y medio desde que Victorino Piraquive Sánchez (31 años) fue asesinado en el barrio San José de Bosa. Sus familiares, en medio del dolor que les embarga al no tenerlo a su lado y la forma en la que se los arrebataron, solo piden a las autoridades que el caso no quede impune.
“Es poco lo que nosotros sabemos. El 7 de diciembre, él almorzó, según me dijo mi cuñada, y a eso de las 4 de la tarde le dijo que iba salir a trabajar y ya después nos enteramos de que lo habían matado”, dijo Paola, hermana de Victorino.
El crimen
Dolor, rabia, tristeza, impotencia y un sinnúmero de sentimientos son los que invaden a la familia de Victorino, un padre de familia y conductor de bicitaxi que un día salió a trabajar, como de costumbre, y se cruzó con la muerte.
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Según se pudo conocer sobre este caso, la víctima recogió a una pareja en Parques de Bogotá, que lo guió hasta el sector de Bosa San José, a la altura de la Carrera 82A con Calle 84 Sur. Al llegar a este punto, los pasajeros bajaron del bicitaxi a Victorino y, no contentos con robarles las pertenencias, le dispararon sin compasión.
“Lo que nos han dicho a nosotros es que era un hombre y una mujer, que cuando llegaron a ese punto, le quitaron el celular, el dinero en efectivo, y que la mujer le pasó el arma al sujeto y este le disparó. Luego se fueron del lugar en el bicitaxi de mi hermano”, narró en medio de su duelo Dora, otra familiar de la víctima.
A los dolientes de Piraquive Sánchez les contaron que él no se había resistido al hurto y que su hermano, al haber recibido el disparo, dio unos pasos en busca de ayuda y terminó entrando a una tienda.
“Él se agarraba el cuello, buscaba ayuda, pero lo más seguro es que cuando lo vieron así, pues la gente se asustó, entonces él terminó entrando a una tienda y cayó sobre una vitrina de helados”, agregó la familiar.
Tras el llamado de la comunidad a las autoridades, los policías llegaron hasta el sitio y ayudaron a trasladar a Victorino hasta el centro médico donde, lamentablemente por la gravedad de su lesión, se declaró su deceso.
“A mi hermana la llamó un compañero de la ruta donde él trabajaba a eso de las 8:30 de la noche, y le dijeron que a Victorino lo habían matado. Mi hermana y mi cuñada se fueron para la ruta, pero allá no les dieron razón, entonces se fueron para el hospital de Bosa Centro, a donde lo llevaron, y allí nos confirmaron que había muerto”, le relató a Q’HUBO la pariente.
Por lo pronto, mientras los familiares de Victorino afrontan su pérdida, claman por justicia, pues aunque nada se los devolverá, al menos el saber que los responsables no andan libres haciendo más daño les dará un parte de tranquilidad.
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“Trabajaba como bicitaxista desde hace unos seis años. No era una persona de problemas, se la pasaba del trabajo a la casa, con su hijo y su esposa. Era muy conocido en el barrio Bosa San Antonio, donde creció toda la vida. Él quería irse a Estados Unidos en busca de oportunidades para continuar construyéndole la casa a mi mamá. Nosotros esperamos que el caso no quede impune”, finalizó Dora.
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