El patrullero Jaime Andrés Ávila Vega, de 23 años, fue vilmente asesinado en Soacha mientras cumplía su deber adelantando una investigación como agente encubierto para desarticular una banda delincuencial que se dedica al expendio de estupefacientes.
La Policía Nacional confirmó por medio de un comunicado emitido en las últimas horas varios detalles sobre el crimen del patrullero Jaime Andrés Ávila Vega, ocurrido al mediodía de este jueves en el barrio San Antonio, de Soacha, cuando el oficial se encontraba desarrollando una investigación como agente encubierto.
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Ávila Vega se encontraba adscrito a la Seccional de Investigación Criminal de la Policía Metropolitana de Soacha, y llevaba tres años y diez meses prestando servicio en la institución.
Antes de ser patrullero, Jaime Andrés Ávila pasaba sus días en su natal Montería, en el departamento de Córdoba, pero en 2019 tomó la decisión de entrar a las filas de la Policía Nacional y desde entonces su carrera pública se destacó.
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Durante el tiempo de servicio en la Policía Metropolitana de Soacha obtuvo 14 felicitaciones, y actualmente se desempeñaba en la Dijín, aplicando su experiencia en la investigación criminal y judicial, labores en las que se encontraba cuando fue asesinado.
Las autoridades informaron que la familia cuenta con todo el acompañamiento psicosocial que un caso de esta envergadura amerita. Las investigaciones avanzan en relación con el material audiovisual que delata a los agresores.
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