El padrastro de la niña fue capturado por la Policía como presunto responsable de los vejámenes a los que la sometía.
Un aberrante crimen se registró en horas de la madrugada de ayer en Ciudad Bolívar. Una mujer llegó con una bebé de 2 años a un centro de salud, donde lastimosamente falleció y el personal médico encontró que presentaba signos de violencia y aparente abuso sexual.
“Nos solidarizamos con la familia de esta menor de 2 años, a quien llevaron al hospital sobre las 2:00 a. m. Nos informan allí que presentaba signos de violencia y esto conllevó su muerte. El padrastro es quien está sindicando por estos hechos y está siendo judicializado en estos momentos”, anunció el general Daniel Gualdrón, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá.
Captura de padrastro
Según se pudo conocer sobre este doloroso caso, cuando la menor fue trasladada al Hospital de Meissen llegó sin signos vitales. El personal de la salud, que hizo todo lo humano por salvarle la vida, encontró que la bebé presentaba signos de violencia y, de inmediato, le dio el reporte a las autoridades.
El padrastro de la niña fue capturado por la Policía como presunto responsable de los vejámenes a los que la sometía, mismos y que condujeron a su fallecimiento.
Por el momento, el caso se encuentra bajo investigación y se espera que los responsables sean condenados por el atroz hecho.
¿Quién cuida a los niños?
Es importante recordar que el pasado 14 de agosto se registró la muerte de una bebé de 1 año en circunstancias similares. Por estos hechos, tres miembros de una misma familia fueron enviados a prisión.
Los imputados por este crimen fueron la madre, el padre y un tío de la víctima, quienes fueron capturados por integrantes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y de la Sijín de la Policía Nacional, en diferentes diligencias realizadas en la ciudad. Un fiscal de la Seccional Bogotá imputó a estas personas distintos delitos, de acuerdo con su posible participación en tres conductas agravadas, cargos que no fueron aceptados.
Lo que ocurría con la menor de edad quedó en evidencia cuando sus padres la llevaron inconsciente al Hospital de Kennedy. En su momento, los médicos constataron que había fallecido horas antes de su llegada.
Posteriormente, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses estableció que la bebé presentaba signos de violencia sexual y dictaminó que la muerte se produjo por asfixia por sofocación.
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