En medio de la oscuridad de la noche de este martes, dos hombres fueron vistos saliendo con apuros de una casa de latas y palos en El Paraíso (Ciudad Bolívar). Esa fue la última imagen que quedó del homicidio de un limpiavidrios que fue hallado con heridas de cuchillo dentro del humilde cambuchito.

Fue la dueña de la casa la que alertó despavorida acerca de lo estaba pasando en aquella casita que hace parte la invasión conocida como La Marranera. Uniformados del CAI Paraíso llegaron a la casa para corroborar lo que pasaba y no faltó inspeccionar mucho para iniciar las labores de criminalística, pues el joven de unos 30 años de edad presentaba múltiples heridas en distintas partes del cuerpo.

Plata, riña y muerte…

Según cuentan en los alrededores, los ocupantes de la casita no llevaban ni una semana habitando el inmueble. Las autoridades alcanzaron a corroborar que eran tres sujetos los que habían arrendado el primer piso del cambuchito ubicado sobre la Calle 71P Sur con Carrera 27I, la semana pasada, por medio de un contrato verbal con la arrendataria.

Pero la convivencia de estos tres personajes, según dicen, de nacionalidad venezolana, resultó no solo agreste sino mortal: “el lunes se escucharon gritos de pelea por una discusión entre los ‘manes’ que estaban viviendo ahí dentro. Luego dicen que el muerto se fue esa noche y no volvió sino hasta el día que lo mataron”, relataron ayer vecinos de la cuadra en cuestión.

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De acuerdo a las últimas informaciones, los inquilinos habían tenido una fuerte discusión, al parecer, por una plata que se les había refundido, razón por la cual la tarde del lunes protagonizaron tremenda gresca, sin embargo, en esa ocasión, no pasó a mayores.

El verdadero crimen aconteció cuando el hoy fallecido volvió al rancho en horas de la tarde. “Duró la calma toda la tarde hasta que volvieron a pelearse, dicen que ahí entre los dos que se volaron lo apuñalaron y lo dejaron ahí tirado sin decir nada, sin llevarse nada”, agregaron otros vecinos un poco asustados.

Los peritos forenses no pudieron determinar la identidad del joven asesinado, ya que los asesinos lo dejaron sin nada. Su cuerpo duró siendo levantado hasta entrada la medianoche de ayer. Finalmente, lo último que pudieron esclarecer sobre estos muchachos implicados, fue que todos serían limpiavidrios que trabajaban en los semáforos del norte de la capital.

Todo esto será usado para dar con el paradero de los maleantes que acabaron con su colega, y los cuales, habrían quedado ponchados en las cámaras de seguridad, huyendo como criminales loma abajo en medio de la oscuridad.

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