Ir a comprar un par de empanadas fue el último propósito de los amigos Juan Pablo Torres Torres y Andrés Rodríguez Rodríguez, quienes se encontraban departiendo en inmediaciones a un bar en el sector de Tres Esquinas, en Ciudad Bolívar.
El sol ascendía ayer en la madrugada cuando los amigos decidieron salir a comer algo para calmar el hambre tras una noche agitada.
Pero ni siquiera este último deseo llegaron a consumarlo, pues a penas dieron sus primeros pasos fuera de la taberna, una motocicleta con dos bandidos a bordo, los cogió a ‘plomo’ hasta dejarlos ‘ad portas’ de la eternidad. Mucho se hizo para salvar a los amigos de 26 y 33 años respectivamente.
La noticia de este grave doble homicidio se esparció como pólvora entre los mercaderes del famoso sector de Tres Esquinas, quienes amanecieron con una tropa de policías en cada una de las tres esquinas, y con un camino de sangre por donde pasaron los amigos buscando alguien que los ayudara.
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En medio del silencio que se han impuesto los comerciantes y residentes de este punto, la policía indaga las causas del doble asesinato.
Doble crimen en Tres Esquinas
De acuerdo a las versiones encontradas, Torres y Rodríguez se encontraban departiendo con otros ‘panas’, cuando en un momento dado el par anunció al grupo que se iban a adelantar una cuadra para comprar empanadas. Eran las 4:50 de la mañana de ayer. Los amigos siguieron derecho por la Calle 76 Sur con Carrera 49C con el fin de buscar las empanadas. Al legar al lugar fueron rociados por una lluvia de balas.
“Sabemos que a los muchachos les llegaron en una moto y los ‘totasiaron’. Eso sí se los llevaron al hospital a ambos pero debieron haber muerto porque toda la mañana vino la Sijín y trajeron una patrulla allí en la esquina”, relató a Q’HUBO un vecino de la zona.
Las detonaciones retumbaron por todas las casas y de una de ellas, la alerta llegó a los radios de los uniformados del CAI más cercano llegaron y vieron a Torres malherido en un andén, inmediatamente lo recogieron y se lo llevaron al Hospital Meissen; de la misma manera, unos vecinos ayudaron a montar a Rodríguez a un taxi con rumbo al mismo centro médico.
Ambos tenían un disparo en el pecho, entraron a reanimación y perdieron la vida cerca de la misma hora.
En cuanto al doble crimen, se sabe que a Torres lo conocían en su círculo como ‘Pato’, quien recibió dos tiros en la arremetida; este muchacho de 26 años sería un lavador de automóviles del sector.
La segunda víctima (Rodríguez), también tenía un sobrenombre entre sus conocidos, le decían ‘El Indio’. En el barrio era conocido por ser ayudante de construcción. Según las autoridades, ‘El Indio’ tenía un montón de antecedentes por delitos que van desde el homicidio agravado hasta tráfico, porte o fabricación de armas de fuego, pasando por otras cuatro páginas.
Todo esto es material de prueba para que las autoridades judiciales esclarezcan por qué motivo los sicarios mataron de manera alevosa a estos amigos que iban a comprar unas empanadas.
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