Hasta un estrecho callejón del barrio Britalia (Kennedy) llegaron sicarios la noche del pasado jueves y atentaron contra la vida de un sujeto que iba caminando por la zona sobre las 9 p. m. Un disparo a quemarropa dejó al sujeto en estado crítico, quien posteriormente fue trasladado a la Clínica Roma.
Al momento del ingreso al centro hospitalario, los médicos confirmaron su deceso. Se presume una posible venganza por viejas rencillas en las que estaba inmiscuido el ahora occiso, a quien conocían con el remoquete de ‘Tribilín’.
Los hechos…
“Esa vaina pasó como a las 9:30 de la noche. El tipo estaba caminando solo, cuando de repente se escuchó el motor de una motocicleta y, tras unos segunditos de silencio, se escucharon las voces de varios hombres que discutían. Luego de eso ‘¡puumm!’, se escuchó el disparo y los asesinos salieron endiablados en esa moto”, le contó ayer a Q’HUBO un comerciante que escuchó los angustiantes momentos en que Alexis Hurtado Angulo fue atacado por sicarios.
Una vez los vecinos de la Calle 46 sur con Carrera 81G se percataron de que había una persona que agonizaba en vía pública, se juntaron en torno al herido mientras llamaban los servicios de emergencia y daban la alerta a las autoridades de la zona.
Cuando los largos minutos de espera llegaron a su fin, el herido fue trasladado de urgencia a la Clínica Roma por las autoridades. La gravedad del ataque saltaba a la vista, el disparo que recibió Hurtado Angulo (de 42 años) en la zona donde el cuello conecta con la cabeza fue letal: cuando el equipo médico de la clínica se disponía a brindarle atención, se dio cuenta de que ya no había nada qué hacer.
Alexis falleció camino al centro hospitalario tras un gravísimo compromiso de sus órganos vitales, sumado a una terrible hemorragia que le diezmó las posibilidades de sobrevivir.
‘Tribilín’, como llamaban al protagonista de esta historia, era un esporádico visitante de la zona, se le veía con cierta frecuencia en el sector de Britalia, aunque vecinos del sector aseguran que el hombre no vivía en esa zona. Al parecer el ataque, por la forma en que Hurtado fue abordado, respondería a una venganza por algún viejo lío en el que estaba inmerso.
La prueba reina con la que cuentan las autoridades es el video de la cámara de seguridad de un local comercial de la zona, que grabó el momento exacto del ataque y la ruta que los asesinos usaron para emprender la huida.
Vecinos de Britalia se declaran “mamados y cercados por la delincuencia”, aseguran además que las autoridades no dan abasto con todo lo que pasa y que “nunca va a cambiar nada si a la gente que capturan la sueltan a las dos horas y salen a seguir
haciendo de las suyas”.
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