El ataque se presentó en el sector de Manzanares, en la localidad de Bosa.
Una de las pequeñas y alejadas calles de la localidad de Bosa fue escenario del asesinato de un hombre que se dirigía a su vivienda en la noche del lunes. El hecho, que se presentó en la calle 73 h sur con carrera 78 b, en el barrio Manzanares, llenó de temor a los vecinos de este popular barrio.
“La verdad, yo no escuché los disparos, eso fue muy raro, porque en este barrio cuando pasa algo se escucha todo. La gente sí decía que le habían disparado a un muchacho. Cuando yo me asomé, vi al pelado botado en el suelo; él se retorcía del dolor. En ese momento vi que le salía sangre del pecho y de un brazo. El pobre intentaba pedir ayuda, pero ya se veía muy mal. Venía en su bicicleta de color verde cuando lo atacaron y así cayó montado en esta”, comentó un residente de la zona a Q’HUBO.
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Ataque sin piedad
Cuentan los testigos que la víctima, un hombre de aproximadamente 35 años,
fue abordada por dos tipos que se movilizaban en una motocicleta negra y, sin mediar palabra alguna, comenzaron a dispararle indiscriminadamente a las 10 de la
noche del lunes.
Después del ataque, varios vecinos del sector salieron a socorrer al joven, que intentaba aferrarse a la vida con las fuerzas que le quedaban. Fue en ese momento que llegó una moto de la Policía, que intentó salvar la vida de este
muchacho.
“Los policías llegaron rápido y apenas vieron al joven tirado lo montaron en la moto
para salvarlo, como fuera. A tres cuadras de camino, se encontraron con una ambulancia y en esa fue que se llevaron al pelado”, relató un residente del barrio.
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El joven, que hasta el momento no pudo ser identificado, fue trasladado al hospital de Bosa, donde fue intervenido quirúrgicamente por varias horas.
“La víctima presentaba dos impactos por arma de fuego, uno en el tórax y otro
en el brazo, con orificio de entrada y salida”, comunicó el teniente coronel Carlos
Ardila, oficial de inspección de la Policía Metropolitana de Bogotá.
Luego de que se dieran las declaraciones oficiales, el joven terminó perdiendo la
batalla contra la muerte en una sala de cirugías, producto de las heridas que recibió. Mientras tanto, sus atacantes lograron escapar y hasta el momento no se sabe de su paradero.
“El pelado como que no era de por acá porque nadie lo había visto antes.
Tenía un jean azul, unos tenis cafés de cuero, una chaqueta gris y una gorrita azul
con la visera gris. La verdad, se veía hasta buena gente. Uno no se explica cómo fue
que le hicieron eso”, dijo una vecina de la zona.
Entre tanto, los agentes de la zona se encuentran recopilando los vídeos del área para poder dar con el paradero de las personas que le quitaron la vida a este hombre.
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