Una enfermedad que afecta a miles de personas en Colombia
La Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII) es una afección crónica que afecta el sistema digestivo y, si no se trata a tiempo, puede tener consecuencias graves, como un mayor riesgo de cáncer de colon. En Colombia, más de 42 mil personas han sido diagnosticadas con EII en los últimos cuatro años, siendo la colitis ulcerativa la variante más frecuente, con una prevalencia de 113 por cada 100.000 habitantes, y la enfermedad de Crohn con 17 por cada 100.000 habitantes. Estas cifras destacan la importancia de un diagnóstico temprano y preciso para prevenir complicaciones graves y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
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Un diagnóstico temprano puede salvarle la vida
A nivel sintomático, la EII se presenta con diarrea persistente, fatiga constante, dolor abdominal y pérdida de peso inexplicable. Estos síntomas pueden ser indicativos de una inflamación crónica en el tracto digestivo, lo que hace que la detección temprana sea clave para mitigar el impacto de la enfermedad. Sin embargo, en Colombia, el tiempo promedio de diagnóstico es de aproximadamente dos años desde la aparición de los primeros síntomas, lo que retrasa el tratamiento y aumenta el riesgo de complicaciones graves, según Ana Cristina Ochoa, Directora Médica de Takeda.
Diagnosticar la EII es un proceso complejo que requiere una combinación de pruebas para confirmar la enfermedad y determinar su severidad. Las pruebas de sangre y heces son los primeros pasos, seguidos de estudios de imagen y endoscopias que permiten observar el tracto gastrointestinal de manera más detallada. Estos exámenes no solo confirman el diagnóstico, sino que también permiten identificar posibles complicaciones y elegir el tratamiento más adecuado. La importancia de realizar una colonoscopia o endoscopia radica en la posibilidad de obtener biopsias que proporcionan un diagnóstico más certero.
¿Cómo funciona el tratamiento?
El tratamiento temprano de la EII no solo mejora la calidad de vida de los pacientes, sino que también previene que la enfermedad avance hacia estadios más peligrosos. Una vez diagnosticada, la enfermedad puede manejarse con medicamentos que controlan la inflamación y reducen los síntomas, mejorando así el pronóstico general del paciente. Sin embargo, la falta de un diagnóstico temprano puede llevar a complicaciones adicionales, como la inflamación de otras partes del cuerpo, incluyendo las articulaciones, la piel y los ojos.
Para enfrentar este desafío, Takeda, una empresa biofarmacéutica global, ha liderado la investigación en el tratamiento de enfermedades inflamatorias como la EII. La compañía se enfoca en desarrollar terapias innovadoras que no solo alivian los síntomas de la EII, sino que también mejoran la calidad de vida a largo plazo. En conjunto con otros actores del sector salud, Takeda busca avanzar en el tratamiento de la EII a través de la investigación científica, priorizando la detección temprana y la personalización de los tratamientos para cada paciente.
La Enfermedad Inflamatoria Intestinal es una afección que requiere atención médica constante y un enfoque integral en su diagnóstico y tratamiento. A través de un seguimiento adecuado, pruebas diagnósticas detalladas y un tratamiento personalizado, es posible controlar los síntomas de la EII y prevenir sus complicaciones más graves. Es esencial que los pacientes estén informados sobre los síntomas y busquen ayuda médica de manera oportuna para asegurar una mejor calidad de vida.
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