Las mujeres sabemos que no hay nada más placentero a la hora de vestirnos, que el momento de estrenar prendas y, para algunas, mucho mejor cuando se trata de zapatos. Pero también hay que reconocer que en muchas ocasiones ese gusto se puede convertir, literal, en un dolor.
Cuando estrenamos zapatos es probable que nos salgan ampollas, que se nos inflamen los pies o que simplemente no nos sintamos cómodas, y la cosa es aún más dolorosa si lo que estamos estrenando son tacones altos. Pero como para todo hay solución, acá te dejamos algunos trucos que puedes aplicar previo a estrenar y evitar ese dolor.
10 trucos
1. Los zapatos con tacón ancho son más cómodos de manejar, por lo que si sus pies son sensibles, comience por evitar los que son estilo aguja .
2. Adicional a la suela con la que viene el zapato, puede optar por agregarle una más acolchada, o incluso venden almohadillas para que las puntas sean más confortables.
3. Unir dos dedos con un poco de micropore (si el zapato es cerrado, por supuesto) le ayudará a relajar la musculatura y los nervios del pie. Debe unir el de la mitad con el que está al lado del meñique.
4. Este truco es de abuelita, aplicar un poco de vaselina sobre los pies, especialmente en los talones y en los dedos, antes de ponerse los zapatos las primeras veces.
5. Untar el zapato por dentro con cualquier crema de manos que utilice, puntualmente en los bordes y en las costuras, no en las suelas porque puede sentirse incómodo.
6. Rellenarlos con papel, con el fin de moldearlos y que se sientan un poco más amplios, podría ser una opción. Solo arme bolas de papel periódico húmedas durante un par de días y verá la diferencia.
7. En el mercado hay desodorantes de pies que, además de evitar la alta sudoración, ayudan a evitar las rozaduras.
8. El infaltable cuando se estrene cualquier tipo de zapato siempre será la curita. Y ojo, no se las ponga solo cuando tiene la ampolla, procure utilizar en las partes más sensibles como medida de precaución.
9.Hay personas que utilizan cremas relajantes en los pies antes de ponerse los zapatos. Sin embargo, es posible que al día siguiente, cuando pase el efecto, pueda aparecer el dolor.
10. La pisada importa, así que empiece por hacer conciencia de cómo camina y, especialmente, si lleva tacones. Recuerde, primero el tacón y después la punta.
El truco del congelador
Si se trata de ampliar, busque una bolsa, la llena de agua hasta la mitad y mida que le quede ajustada al zapato. Luego, llévela, por lo menos, por una noche al congelador, pues la presión del hielo hará su efecto. Eso sí, procure usarlos de inmediato para que sigan tomando su forma del pie.
Con hielo mineral se previene el dolor
Al menos media hora antes de estrenarse los zapatos, prepare su pie aplicando un poco de crema de hielo mineral, la cual venden en las farmacias sin prescripción médica, porque le dan muchos usos.
Por ejemplo, los deportistas previenen y alivian dolores con ella. Incluso, si tiene más tiempo, podría hacer doble aplicación para mayor efecto.
Puede ser obvio, pero pilas con la talla
Esta recomendación puede parecer muy obvia, pero es la razón por la cual muchas personas no soportan sus zapatos. Tenga en cuenta que su talla puede variar, dependiendo de la horma de la marca y, aunque usted quiera creer que entra en esos tacones en oferta, que son una talla más pequeña que la suya, a la larga eso le ocasionará problemas de salud.
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