Durante años venimos escuchando que hay artistas que le venden su alma al diablo a cambio de talento, belleza y fama. Uno de ellos se especula que fue Freddie Mercury y cuyo pacto estaría plasmado en su éxito ‘Bohemian Rhapsody’, un tema que compuso en el año 1975 para la agrupación británica Queen y cuya letra es un tanto incomprensible para algunos, pero bastante evidente para los amantes del mundo paranormal.
De hecho, Marco Bustamante explicó detalladamente en su programa ‘Crónica Paranormal’ las evidencias de este trato oscuro, el cual le resumimos a continuación en Q’Misterio para que saque sus propias conclusiones.
¿Qué es una rapsodia?
Para empezar, rapsodia es una pieza musical que proviene del romanticismo, la cual está compuesta por varias temáticas libres y sin relación alguna. La canción de Freddie Mercury está compuesta por cinco partes: balada, un solo de guitarra, sección operística, rock y coda o cola, en este caso regresa a la balada inicial.
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Homenaje a Fausto
Esta canción hace una reinterpretación de la historia de Fausto, novela del dramaturgo alemán Johann Wolfgang von Goethe. Es un anciano que hace un pacto con el diablo para volver a ser joven y cuando muere el demonio regresa para cobrar su alma. Cuando intenta escapar, se genera una disputa entre ángeles y demonios. Esta parte se representa con rock en la canción de Queen.
Amante de la ópera
Como bien saben los fanáticos de Freddie, él era amante de la ópera y tenía una gran amistad con la cantante Montserrat Caballé, quien lo acompañó en uno de sus conciertos. La parte operística de ‘Bohemian Rhapsody’ representa el momento en que Fausto logra colarse en el cielo.
La letra…
En la primera parte se escuchan las voces de los ángeles que le dicen a un chico que se arrepienta de lo que está a punto de hacer, que abra los ojos y mire al cielo. Pero Freddie canta: “Mamá, acabo de matar un hombre”, haciendo alusión que decidió venderle su alma al diablo y que ha tirado su vida a la basura.
La frase contundente
La estocada final que le daría veracidad al presunto pacto que Freddie hizo con el demonio estaría plasmado en la parte donde canta: “Belcebú tiene un demonio apartado para mí, para mí”. En la parte final del tema se arrepiente de haber tomado esta decisión y dice que merece ser salvado.
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